Un grupo de constituyentes presentó una iniciativa de norma que busca eliminar el Tribunal Constitucional, TC, y que su rol lo cumpla una sala de la Corte Suprema.
Además, en la propuesta, firmada por un grupo de frenteamplistas e integrantes de Movimientos Sociales, desaparece el control preventivo que actualmente ejerce la entidad.
El texto “define que el tribunal debe definir la cuestión de inaplicabilidad por mayoría, y que la sentencia que acoja la cuestión solo tendrá las razones que fundamentan el voto de mayoría”.
Además, “consagra que una vez declarada la inaplicabilidad de un precepto legal, este no podrá ser aplicado en la gestión judicial en la que se originó la cuestión de constitucionalidad”, sostiene.
La constituyente Manuela Arroyo, detalló que la iniciativa “radica el control de inaplicabilidad de una norma por inconstitucional en la Corte Suprema, esto quiere decir que se pone fin al control preventivo de constitucionalidad que actualmente ha realizado el Tribunal Constitucional y que también el control represivo de inaplicabilidad de una norma, que dice relación con comprender y establecer si una norma es acorde o no con la Constitución, ya va a dejar de ser competencia del Tribunal Constitucional”.
Por su parte, el convencional Christian Vera aclaró que “no se trata de la eliminación de la justicia o el control constitucional, sino que es su reemplazo y una modificación muy sustantiva”.
“¿Es por qué? Obedece a múltiples razones, principalmente el desprestigio de un tribunal que se ha transforma en la práctica en un legislador -la tercera cámara-, pero sobre todo para actualizar el tipo de control en términos democráticos”, explicó.
En concreto, la propuesta fue firmada por los convencionales HUgo Gutiérrez, Fernando Atria, Manuela Royo, Christian Viera, Vanessa Hoppe, Mauricio Daza, Jaime Bassa, Aurora Delgado, Damaris Abarca, Daniel Stingo, María José Oyarzún, Amaya Álvez, Giovanna Roa, Constanza Schönhaut, Ignacio Achurra y Beatriz Sánchez.