Un grupo de 11 militares colombianos reconoció este martes su responsabilidad en los llamados “falsos positivos”, en una audiencia de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP).
“Asesinamos personas inocentes, campesinos”, aseguró frente a múltiples víctimas el suboficial retirado del ejército, Néstor Gutiérrez, que como cabo primero y miembro de la Brigada Móvil No. 15 ejecutó a varios jóvenes inocentes entre 2007 y 2008 y es uno de los imputados del auto emitido por la JEP el pasado 6 de julio.
“Ejecuté, asesiné familiares de los que están acá, llevándolos con mentiras, con engaños, disparándoles, asesinándolos cruelmente, cobardemente, poniéndoles un arma para decir que era un combate, que eran guerrilleros”, reconoció.
Esta audiencia de reconocimiento, en la que participaron Gutierrez y los otros 10 militares y un civil imputados por crímenes de guerra y de lesa humanidad, responsabilizados de al menos 120 asesinatos en la región del Catatumbo, en Norte de Santander, es el paso previo para que la JEP proponga las sanciones contra ellos acordadas con las víctimas.
“Si los comparecientes reconocen verdad completa, detallada y exhaustiva y reconocen su responsabilidad podrán ser elegibles a una sanción que no es privativa de libertad, sino que tiene un componente reparador, restaurador”, recordó la magistrada de la JEP, Catalina Díaz, al principio de la audiencia.
