El domingo primero de mayo se llevará a cabo la apertura del Complejo Fronterizo de Colchane, por lo que desde la Delegación Presidencial de Tarapacá han trabajado coordinadamente con los funcionarios y las agencias de control que están dispuestas en la frontera, para poder tener un flujo migratorio ordenado.
Al respecto, el delegado Daniel Quinteros, valoró que es una medida necesaria para la reactivación económica de la región de Tarapacá.
En ese sentido, Quinteros destacó que Tarapacá depende, en cierta medida, “del contacto y del intercambio que tenemos con nuestros vecinos, como Bolivia, Paraguay y el norte de Argentina y tantos otros. Entonces, poder reabrir nuestra frontera es una medida que nos va a permitir recuperarnos económicamente de esta crisis que estamos saliendo recién, a propósito de la pandemia. También nos interesa poder resguardar el tránsito ancestral que se da en el altiplano y distintas otras situaciones que hoy están afectando a personas que tienen derecho de poder ingresar”.
Junto con lo anterior, el delegado precisó que con la apertura de la frontera se espera transitar hacia una nueva política migratoria que sea capaz de respetar los derechos humanos y resguardar las consecuencias que la migración tiene para los vecinos y las vecinas de la región.
Finalmente, la autoridad regional recordó que la Ley de Migraciones que se encuentra vigente no ha sufrido modificaciones, por lo que todavía es obligación tener una visa consular para ingresar al país.