El vicepresidente de la Convención Constitucional, Gaspar Domínguez, se refirió a la denuncia del constituyente de Evópoli, Hernán Larraín Matte, quien acusó a la mesa directiva de modificar un inciso de la propuesta de nueva Constitución “sin respetar la voz del Pleno”.
Al respecto, en conversación con Radio Portales, el convencional afirmó que “deslizar la sola idea que alguien de la mesa directiva pueda modificar el texto es muy grave porque la mesa directiva no tiene acceso a este texto, es la secretaría”.
En este sentido, el vicepresidente de la mesa directiva aclaró que “la secretaría en sus actas pública todo lo que se hace en el texto y es ella la responsable de ingresar estas modificaciones, informarlas y el texto que le entregaremos al Presidente Gabriel Boric es el texto hecho por la secretaría y no por nosotros”.
“Es una acusación que no tiene ningún sustento y que pone en duda el trabajo de la secretaría y eso es muy grave, porque si hay algo en lo que estamos todos de acuerdo en la Convención es que el trabajo de la secretaría ha sido un trabajo impecable”, agregó Domínguez.
Asimismo, detalló que el cambio realizado al texto de propuesta de la nueva Constitución “estaban las expresiones pueblos indígenas y pueblos originarios, repetidas muchas veces, entonces Armonización cambió todas las expresiones de pueblos originarios a pueblos indígenas para que quedara uniformado”.
En este sentido, el constituyente señaló que “producto de la última votación algunas cosas se aprobaron y el resultado del texto es que la expresión pueblos indígenas aparece alrededor de 34, 35 veces y quedó en un artículo la expresión pueblos originarios y como la mesa directiva tiene la atribución de corregir las referencias, es que se adoptó el acuerdo con ocho votos a favor de sus nueve integrantes para uniformar la expresión a pueblos indígenas”.
En tanto, Domínguez precisó que existió otro cambio a la propuesta de nueva Constitución que tuvo el voto a favor del convencional Larraín, que tiene relación a “la Agencia Nacional de Agua”, donde se corrigió el nombre correcto de Agencia Nacional del Agua, que era un cambio de denominación y el convencional voto a favor.
