Este miércoles el ministro de Justicia y Derechos Humanos, Luis Cordero, afirmó que no existe “una prueba concluyente” sobre la muerte del poeta Pablo Neruda, fallecido días después del golpe de Estado de 1973.
En su participación en la Tribuna EFE-Casa de América celebrada en Madrid, Cordero manifestó que el informe pericial presentado el pasado 15 de febrero ante la jueza encargada del caso, Paola Plaza, en el que se deduce que el poeta fue “envenenado” días después del golpe, “es una prueba adicional“.
Además, el secretario de Estado abordó este informe, señalando que ha habido “una gran discusión sobre si efectivamente tenía conclusiones“ y señaló que “la conclusión divulgada hasta ahora es que no hay prueba concluyente sobre la muerte de Neruda”, considerando que “el Gobierno no es solo interesado, sino que es querellante en la causa, y el pago de los peritajes se realiza con fondos del Estado”.
En esa línea, el titular de Justicia subrayó que “la situación en la actualidad después de ese segundo informe es que la jueza Plaza ha dicho que está siendo objeto de investigación, que es una prueba adicional”.
“De acuerdo a antecedentes disponibles en el debate nacional, no hay antecedentes concluyentes, el detalle del peritaje está en manos de la ministra Plaza, otra gran jueza a cargo de investigaciones de derechos humanos, está en etapa de evaluación“, añadió.
A su vez, Cordero recordó que “dadas las características de ese delito, en el momento en el que ocurrió, se está aplicando la ley de enjuiciamiento criminal antigua que permite tener a un juez de instrucción”.
Cabe mencionar que la muerte del poeta chileno, además de diplomático, ha estado rodeada de un velo de sospechas, aunque en principio, se habló que el Premio Nobel padecía de un cáncer.