Un informe reciente del Consejo de Prensa Peruana (CPP), reveló que en el último semestre todas las instituciones del Estado han intensificado sus ataques contra la prensa, mientras que el Ejecutivo, el Legislativo, el Ministerio Público y diversos gobiernos regionales en Perú han adoptado medidas que vulneran gravemente la libertad de expresión.
El informe de 12 páginas fue presentado ante la Asamblea General de la Sociedad Interamericana de Prensa y subraya que las iniciativas legislativas, las demandas por difamación, las investigaciones fiscales, así como el levantamiento del secreto de las comunicaciones y los allanamientos, se han convertido en mecanismos recurrentes para acallar las voces críticas.
Estos ataques, que incluyen impedimentos a la cobertura de eventos de interés público y agresiones verbales a periodistas, reflejan un patrón preocupante de intimidación y censura.
“En el último semestre, todas las instituciones del Estado reportadas en este informe se han enfrentado a la prensa por igual. Esto representa un cambio con respecto a periodos anteriores, cuando el Poder Ejecutivo y el Legislativo disputaban la posición de principal agente agresor de periodistas y medios de comunicación. Hoy, Ejecutivo, Legislativo, Ministerio Público y gobiernos regionales atacan las libertades de expresión de manera recurrente”, se lee en el informe.
El documento también menciona el papel activo de altos funcionarios del Estado Peruano en la intensificación de los ataques. Entre los casos más sonados figuran el expresidente del Congreso, Alejandro Soto, y el ministro del Interior del Perú, Juan José Santiváñez, quienes han tomado actitudes agresivas y sistemáticas contra los medios de comunicación.
Estos funcionarios han recurrido a amenazas, insultos y denuncias para acallar a los periodistas que investigan sus gestiones. A pesar de la gravedad de las denuncias, pocas instituciones del Estado han iniciado investigaciones serias sobre estas acciones, lo que deja a los medios de comunicación en una posición de vulnerabilidad frente a los poderes políticos.
“Son muy pocas las ocasiones en las que alguna institución del Estado opta por investigar estos casos, lo que deja a la prensa políticamente indefensa frente al avasallamiento de la libertad de expresión”, se agrega en el reporte.
Por último, el Consejo de Prensa Peruana también ha alertado sobre cómo la erosión de la libertad de expresión ha trascendido más allá del ámbito político, alcanzando otros sectores como el cine. En este contexto, productores y cineastas han reportado casos de censura y limitaciones en sus producciones.