Este martes el Servicio Médico Legal (SML) llegó hasta la sede vecinal de Alto Hospicio donde se velaba a la joven fallecida Madeley Aduviry Córdova y solicitó a la familia el retorno del cuerpo para realizar nuevos peritajes.
Recordemos que la joven de 18 años y de nacionalidad boliviana fue asesinada en la toma La Pampa de Alto Hospicio el pasado viernes 1 de marzo. Además, la Policía de Investigaciones (PDI) logró detener al presunto homicida durante el fin de semana pasado. Se trataría de un hombre de 40 años y de nacionalidad paraguaya que tiene antecedentes por delitos sexuales.
En tanto, la Fiscalía de Tarapacá informó que aún “continúan realizando diligencias” en torno al femicidio de la joven “a objeto de obtener los mayores antecedentes” para la audiencia de formalización del imputado que permanece detenido.
El Juzgado de Garantía de Alto Hospicio decidió ampliar la detención del sujeto de iniciales E.C.O. hasta el miércoles 6 de marzo y la investigación fue declarada como reservada.
De acuerdo al Ministerio Público, la víctima presentaba diversas heridas en su cuerpo, producidas por elementos cortopunzantes. Jhuly Córdova, madre de Madeley, confirmó que ella encontró el cuerpo de su hija y pidió que sea repatriado a Bolivia y que se haga justicia por este crimen.
Según dio a conocer la familia de Madeley a Radio Paulina el pasado lunes 4 de marzo, la información que manejan respecto a lo sucedido con su hija no es algo concreto y solamente sabían “cosas que salen por internet”.
Córdova había afirmado que hasta el momento “nadie se ha acercado a darnos ninguna información, no contamos con información ahorita. Lo que sabemos es por las redes sociales, lo que publicaron y realmente no sabemos hasta qué punto es cierto o no”.
Pese a que la investigación fue declarada como reservada, la Fiscalía de Tarapacá emitió un comunicado, explicando que “mantienen informada a la familia de la víctima de todas las acciones que se están desarrollando”.
Incluso este martes la fiscal regional, Trinidad Steinert, junto a su equipo directivo se reunieron con los padres de Madeley, explicándoles “las pericias pendientes y la necesidad de realizar nuevas diligencias en la fallecida, acción que contó con la anuencia de los padres”.
