Este lunes la comisión de derechos humanos, nacionalidad y ciudadanía del Senado continuó la discusión del proyecto voto joven, que rebaja la edad para ser ciudadano y otorga el derecho a sufragio en elecciones municipales a quienes hayan cumplido 14 años de edad y, para elecciones parlamentarias y presidenciales, a 16 años de edad.
Para el autor del proyecto, y presidente de la comisión de derechos humanos del Senado, senador Alejandro Navarro (PRO), “han sido cerca de 40 las y los invitados en el período de audiencias públicas, quienes expusieron sus visiones y perspectivas sobre el voto joven, nuestro proyecto que entrega el derecho político a la participación de la democracia de los jóvenes y adolescentes en todo el país. Hemos abierto una discusión necesaria y de futuro para Chile”.
La sesión de este lunes se enfocó en la natural comparación que se realiza en el debate público sobre la responsabilidad penal adolescente y la posibilidad de otorgar la calidad de ciudadano y su ejercicio a voto a jóvenes.
Para Nicolás Oxman, abogado director del programa de Magíster en Derecho Penal de la Universidad Central, las diferencias son “puramente teóricas”. “En cuanto a la vinculación exacta o correlativa entre el derecho de ciudadano que conlleva el ejercicio del voto con la responsabilidad penal, es una cuestión que se ha ido diferenciando en la mayoría de los ordenamientos jurídicos. Se ha ido permitiendo, extendiendo, y fijando la posibilidad de participación en elecciones municipales sobre todo en el ámbito europeo a partir de los 16 años de edad, ese ha sido el margen de edad para efectos de participación de los menores en la vida cívica y ese derecho a voto no está condicionado en ningún caso a la circunstancia de haber o no cometido un hecho punible”, argumentó.
Asimismo, para Roberto Cárcamo, director de la ONG Fundamental, encargada de la promoción y el robustecimiento del Estado de derecho y la democracia, la iniciativa es discutible “por los avances que ha tenido Chile y su educación al menos su cobertura y por el acceso a la información que tienen los jóvenes. Los adolescentes actuales tienen la madurez suficiente para participar de los asuntos públicos y particularmente de la democracia y las elecciones, entonces como ejecución del articulo 12 de la Convención de los Derechos del Niño debiese reconocérseles por lo menos el derecho a sufragio.
FUENTE: Progresistas ©2018