El presidente de Bolivia, Luis Arce promulgó este martes una ley para elegir por voto popular a las autoridades judiciales, lo que permitió que campesinos y cocaleros afines al expresidente indígena Evo Morales suspendieran un bloqueo de carreteras, que duró dos semanas y dejó millonarias pérdidas en Bolivia.
Los cocaleros y campesinos leales a Morales comenzaron sus reclamos el pasado 22 de enero, paralizando parte de Bolivia con hasta 36 puntos de bloqueo, la mayor cantidad en el departamento de Cochabamba (centro), su bastión político.
Los labriegos exigían una ley de elecciones para renovar los principales cargos del poder judicial y también como rechazo a los jueces del Tribunal Constitucional que inhabilitaron al exmandatario Morales (2006-2019) para postularse por cuarta vez a la presidencia en 2025, alegando que ya había cumplido con los dos mandatos que permite la Constitución.
La ley aprobada permitirá que el órgano electoral convoque a comicios para elegir los nuevos 26 jueces de los tribunales más importantes de Bolivia.
Luego del anuncio, Morales dijo en su cuenta de la red social X este martes que falta aún que los magistrados “ilegales se vayan a sus casas”.
El Congreso aún no abordó esa exigencia de los campesinos, la oposición y de parlamentarios afines al líder indígena.
Decenas de campesinos, bajo una nutrida vigilancia policial, estuvieron apostados toda la noche del martes y parte de la madrugada del miércoles afuera del Congreso para seguir la discusión de la ley.
El cierre de vías dejó sin conexión terrestre a los departamentos de Santa Cruz (este) y La Paz. Tras la aprobación de la ley en el Congreso, algunos puntos de bloqueo comenzaban a planificar su desmonte.