El Banco Central de Chile publicó hoy su Informe de Política Monetaria (IPoM) de marzo de 2025, en el que proyecta un crecimiento económico moderado para el país en el presente año, con un rango estimado entre 1,75% y 2,75%. Sin embargo, el informe también advierte sobre los persistentes riesgos inflacionarios y la incertidumbre del panorama externo.
El IPoM destaca que la actividad económica local ha mostrado un dinamismo mayor al esperado en los últimos meses, impulsada principalmente por las exportaciones. El PIB creció un 2,6% en 2024, y se espera que la economía siga creciendo en torno a su tendencia entre 2025 y 2027.
No obstante, el Banco Central mantiene su preocupación por la inflación, que si bien ha evolucionado en línea con lo proyectado, aún se encuentra en niveles elevados. Se prevé que la inflación convergerá a la meta del 3% a inicios de 2026, y se espera que descienda en la segunda mitad de este año y comienzos del próximo.
El principal riesgo para la economía chilena, según el informe, es la mayor incertidumbre del panorama externo. El Banco Central advierte sobre la posibilidad de eventos con consecuencias negativas significativas en la economía mundial y en Chile, especialmente si se combinan tensiones comerciales con disrupciones en las alianzas políticas internacionales.
Ante este escenario, el Consejo del Banco Central reiteró que evaluará los próximos movimientos de la Tasa de Política Monetaria (TPM) teniendo presente la evolución del escenario macroeconómico y sus implicancias para la convergencia inflacionaria. El IPoM señala que los datos de cierre de 2024 e inicios de 2025 dieron cuenta de una actividad que ha mostrado un dinamismo mayor al esperado.
En resumen, el Banco Central proyecta un crecimiento económico moderado para Chile en 2025, pero alerta sobre los riesgos inflacionarios y la incertidumbre del panorama externo. La política monetaria se mantendrá cautelosa, con el objetivo de asegurar la convergencia de la inflación hacia la meta del 3%.