El comandante general de la Policía Boliviana, Augusto Russo, confirmó que el conductor de un bus que causó la muerte de más de 30 personas en Uyuni “estaba absolutamente ebrio” y tenía cinco veces más de grado alcohólico permitido.
La colisión de dos buses ocurrió el sábado en la carretera Uyuni-Oruro de Bolivia, dejando a 36 personas muertas de forma instantánea y 40 heridos. El conductor fue identificado como Ramiro Martín Mamani de 45 años y falleció en las últimas horas en el quirófano del hospital Bracamonte, de Oruro.
“Tenía alcohol en la sangre cinco veces más de lo tolerable”, complementó la autoridad en una entrevista con la televisión estatal. En Bolivia, el grado alcohólico que no es pasible a sanción es de 0,5, por lo que el conductor del bus superó en gran medida esa barrera.
Russo hizo un llamado a los conductores de transporte público y privado a tener mayor conciencia al momento de conducir un motorizado e instó a la población a tener cuidado en el consumo de bebidas alcohólicas.
Los últimos informes policiales indican que el bus de la empresa Emmanuel, que se dirigía desde Potosí hacia Uyuni invadió carril causando la tragedia en las horas previas al Carnaval. Por el accidente, las fraternidades carnavaleras de Uyuni deberán llevar una cinta negra en señal de duelo los tres días de fiestas.
El general Russo indicó que la Policía de Tránsito cumple con su labor en las terminales del país en las que se realizan operativos, sin embargo, las infracciones son cometidas a lo largo del viaje. En el caso del accidente en Uyuni, el chofer pasó por el control, pero consumió alcohol en el camino.
“Si bien la obligación es de la Policía, pero pedimos a la población coadyuvar en el control, porque son ellos los que tienen que llegar sanos”, añadió.