El Colegio de Profesoras y Profesores de Chile manifestó su rechazo al proyecto de reforma constitucional presentada por senadores de la UDI, que pretende modificar la Constitución “para declarar la educación parvularia, básica y media como un servicio esencial, con el objetivo de impedir las movilizaciones y sancionar a quienes las promuevan, participen y organicen”.
A través de un comunicado, el gremio docente indicó que considera “que este proyecto es una amenaza para el legítimo derecho a manifestarse y reclamar mejoras en las condiciones laborales y salariales”.
“La historia de lucha de los trabajadores y trabajadoras para poder manifestarse por las diversas problemáticas que nos afectan es larga y ardua. En el caso de las y los profesionales de la educación, los problemas de financiamiento, remuneraciones, infraestructura, entre otros, son motivos legítimos para denunciar, reclamar y movilizarse”, agregaron.
En el documento, se sostiene que este proyecto de ley “es un retroceso injusto, desatinado y antidemocrático, ya que las movilizaciones de trabajadores y trabajadoras son una forma de manifestación y ejercicio de derechos fundamentales, como la libertad de expresión, reunión, asociación y el derecho a petición, consagrados en la Declaración Universal de Derechos Humanos y el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales”.
Según el Colegio de Profesores, esta iniciativa legal “transgrede los Convenios 87 y 98 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), que garantizan la libertad sindical y el derecho a negociar colectivamente”.
“La educación es un derecho fundamental, y el Estado tiene la obligación de garantizarlo. Sin embargo, si se pretende declararla un servicio público esencial, los diferentes poderes del Estado deberían primeramente asumir y garantizar condiciones mínimas para su desarrollo, como buena infraestructura, materiales adecuados, gestión eficaz y democrática como también remuneraciones dignas para las y los trabajadores de la educación. Lamentablemente estamos muy lejos de aquello”.
En este sentido, indicaron que “el sistema educacional chileno enfrenta serios problemas de infraestructura, insuficiencia de recursos materiales, deficiencias severas en la gestión, deudas previsionales con las y los trabajadores, inestabilidad laboral y en general abandono de la educación pública por parte del Estado. En este contexto, resulta contradictorio y éticamente cuestionable el proyecto de ley en comento”.
“Como Colegio de Profesores, rechazamos enfáticamente el objetivo de este proyecto de ley, que solo pretende impedir el ejercicio del legítimo derecho a huelga y movilización de los trabajadores de la educación, sin considerar las necesidades y demandas de las comunidades educativas”, acotaron.
Por último, el gremio de profesores consideró que “este proyecto no va en el sentido de mejorar las condiciones de la educación pública en nuestro país, que es lo más importante. En lugar de eso, pretende instalar obstáculos y restricciones a los movimientos sociales que solo buscamos sacar a la luz deficiencias, injusticias y abusos”.
Los docentes enfatizaron que “este tipo de medidas son propias de gobiernos autoritarios y dictatoriales, que buscan limitar los derechos y libertades fundamentales de las y los ciudadanos. Nos oponemos firmemente a cualquier intento de restringir el derecho a manifestarse y a ejercer la libertad sindical”.
“Exigimos un enfoque más integral y democrático, que priorice la mejora de las condiciones de la educación pública y el bienestar de las comunidades educativas, así como un financiamiento basal que permita desarrollar adecuadamente las labores educativas, en lugar de buscar controlar y reprimir las manifestaciones y demandas sociales”, comentaron.
Recordemos que la bancada de senadores de la UDI ingresó un proyecto de ley que busca declarar la educación parvularia, básica y media como un “servicio esencial”, para así asegurar la continuidad de las clases durante el año escolar, incluso en contextos de huelgas, manifestaciones o amenazas externas.
La propuesta fue presentada la semana pasada por el subjefe de bancada y presidente de la Comisión de Educación del Senado, Gustavo Sanhueza, y cuenta con el respaldo de parlamentarios de Chile Vamos y sectores independientes del bloque opositor.